Kontorstil ha llevado a cabo la ejecución integral del nuevo espacio de Tattoox en Barcelona, una tienda-estudio de 316 m² que redefine el concepto tradicional de estudio de tatuajes para convertirlo en un punto de encuentro artístico y cultural.
Tattoox nació con la idea de hacer del tatuaje una experiencia más accesible, artística y social. Lo que empezó como “el Tinder de los tatuajes” ha evolucionado hasta convertirse en una comunidad que fusiona arte, identidad y cultura urbana.
En este sentido, su nuevo local físico en Barcelona responde a esa filosofía: combina la funcionalidad de un estudio clásico con un espacio polivalente destinado a exposiciones, eventos y workshops.
Proyecto retail para tienda-estudio de tatuajes
El proyecto ha sido desarrollado junto al estudio de interiorismo Huuun, encargado del diseño del espacio, con quien Kontorstil ha trabajado de forma coordinada desde la fase inicial.
Por tanto, Kontorstil ha asumido la reforma completa del local, incluyendo demoliciones, obra, instalaciones eléctricas y de climatización, carpintería metálica y de madera, pintura, iluminación y rotulación. Además, ha ejercido como project manager, coordinando todos los oficios para garantizar el cumplimiento de plazos y calidades.
Durante el proceso de ejecución, el proyecto ha presentado retos técnicos. Entre ellos, la detección de gases subterráneos en el sótano, que obligó a rehacer la solera por completo, o la necesidad de ajustar la iluminación para crear una atmósfera óptima tanto para el trabajo de los tatuadores como para la zona de eventos. Cada desafío ha sido abordado por la firma como una oportunidad para aportar soluciones técnicas eficaces y creativas.
Mobiliario a medida e instalación para proyectos
Asimismo, Kontorstil se ha encargado del desarrollo técnico y la instalación del mobiliario comercial a medida, fabricado por InscaShops a partir del diseño de Huuun.
Entre el mobiliario para tiendas materializado, destaca el tramex de doble pletina con malla galvanizada en los arcos de fachada, que da soporte a los corpóreos de la marca; el mostrador de DM con estructura metálica revestida en melamina efecto espejo e iluminación LED integrada; y un banco corrido de obra, junto con estructuras modulares en aluminio pulido y anodizado para la exposición de merchandising, espejos y otros elementos.
El resultado es un espacio que representa fielmente el espíritu innovador de Tattoox, y que convierte la experiencia de visita en algo más que una cita para un tatuaje: en una vivencia artística, social y urbana. Para Kontorstil, este proyecto reafirma su compromiso con el desarrollo de soluciones integrales en el ámbito del retail, apostando siempre por el diseño, la funcionalidad y la excelencia en la ejecución.